Primero papá, primero mamá

Hay a quienes les puede sorprender el título de este post. Sí, para mamá lo primero es papá y para papá lo primero es mamá. Para los que habéis leído mi libro, ya sabréis que es el capítulo 12.

Los hijos tienen que ver unos papás fuertes que se aman a pesar de los pesares. Pues a veces ven que discutimos por tonterías o por cosas más importantes. Si la discusión ha sido delante de los niños, las paces y el perdón tiene que ser delante de ellos, aunque sea dos días más tarde: “perdona que ayer me disgusté y levanté la voz, sabes que estoy pasando un momento de mucho trabajo en la oficina…” Después, un cariñoso achuchón y todo solucionado.

Cuando oímos la llave en la puerta, dejamos de hacer lo que hacíamos y corremos a darle un abrazo, diciendo cuánto he pensado en ti, como si estuviéramos recién casados.

A veces cuesta, pues estamos en medio de un caos impresionante: dos se están peleando por el coche rojo, el agua de los macarrones está saliendo de la cazuela, llama por teléfono tu suegra que esta en el súper y si nos falta algo… ¡Qué difícil es a veces demostrar con hechos que para cada uno lo primero es su cónyuge!

Hay que poner la cabeza y la inteligencia. Y querer. Los hijos son súper absorbentes y siempre piden más y más y más.

Recuerdo cuando con mi marido nos encerrábamos en nuestra habitación y les explicábamos a los peques “ahora es tiempo de papá y mamá. No se puede molestar ni aporrear la puerta. Si os peleáis tenéis que aprender a solucionar vuestros problemas. Papá no es el policía. Os queremos mucho”.

A veces me he encontrado alguna amiga que me dice “fíjate Rosa, mi hija es exacta a mí, tiene el mismo porte, se mueve como yo y hace hasta los mismos gestos. Es mi clon”. Sí, pero hemos de enseñar a nuestros hijos que para mamá primero es papá y viceversa. Los hijos quieren ver unos papás fuertes y unidos. Necesitan verlo.

También hay que dedicarnos tiempo, por lo menos un día a la semana salir solos. Sé que es difícil, pues cuando tienes hijos pequeños hay que coger una canguro y esto supone un gasto extra y cuando uno está recién casado… pero hemos de cuidarnos y coger fuerzas juntos, pasarlo bien, reír, hacer deporte… Hablar, bueno esto más la mujer, que los hombres no tienen tanta necesidad de comentar las 24 horas del día…

El matrimonio es una aventura apasionante. Hay que maravillarnos de la maravillosa, maravillosa vida de Familia. Solo se vive una vez, y vamos a vivirla a TOPE!!

Primero papá, primero mamá.