Tengo el recuerdo de que en mi casa se celebraba todo. Santos, cumpleaños, bautizos, comuniones, confirmaciones… y multiplicado por mis hermanos y mis padres… finalmente casi cada día era un motivo de fiesta o de hacer un postre especial.
Hace unos días celebramos el cumple de Perico. 24 años. Llegamos tarde a casa, pues nos invitaron a Valencia a un Congreso de familias numerosas y participamos en la mesa redonda “Familias numerosas, expertas en el lado positivo de la vida”.
Pues a Pepa, la ahijada de Perico, se le ocurrió hacer un pastel. No es muy diestra en la repostería: prácticamente no subió el bizcocho y no sabía muy bien. Pero varios hermanos repitieron, pues se había esforzado. Encima lo recubrió de chocolate y Perico dijo que no le gustaba… Finalmente no quedó nada en la fuente. Me encantó ver cómo varios hermanos hacían un esfuerzo por acabárselo
Este verano volveremos a jugar a “Master Chef”. A ver si Pepa coge más afición por la cocina… Como todos somos muy tragones, seguro que es una actividad que triunfará
Ante todo «dobles» felicidades, una para el cumpleañero y las segundas para todos por tener una hermana como Pepa, que pese a no gustarle cocinar, pone tiempo y esfuerzo para que su hermano tenga su tarta. Animo Pepa con tu voluntad y repitiendo todo se consigue.
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Que rico leerte Rosa, te seguimos desde Santiago de Chile.
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Muchas felicidades🎂🎂🎂🎉🎉🎉🎉🎉🎉🎉🎊🎊🎊🎊🎊🎊🎊
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Es que todos los días hay motivos para celebrar…ellos harán lo mismo de mayores💙
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